Cuidados para las alergias en la piel de los gatos
Las alergias en la piel de los gatos son muy comunes y pueden deberse a diferentes causas como parásitos, infecciones bacterianas o por hongos, enfermedades sistémicas o reacciones alérgicas a algunos materiales o sustancias.
Aunque, este tipo de problemas en la piel de los gatos les generan bastante incomodidad, en la mayoría de los casos pueden tratarse, sin embargo, es necesario la ayuda de un veterinario experto para averiguar la causa de la alergia y así seguir el tratamiento adecuado. De igual forma, hay cuidados y acciones que debes tener en cuenta para cuidar de tu gato cuando presente este tipo de afecciones cutáneas, que, aunque no son mortales pueden generar problemas más graves.
Estar siempre atento a los cambios en su piel
Observar e identificar los cambios en su piel es primordial para reconocer algún problema cutáneo en los gatos. Si al acariciarlo o peinarlo sientes pequeñas costras o algunas áreas se vean enrojecidas o inflamadas, así como lesiones en su cara, abdomen o en la parte externa de los muslos, deberías consultar a su veterinario antes de iniciar cualquier tratamiento.
Indicadores en su piel como irritación, descamación, puntos blancos o negros, masas o bultos y zonas que se vean infectadas son importantes para alertarnos que algo no está bien en tu gato y es necesario acudir al veterinario para tratarlo.
Además, los gatos con alergia suelen rascarse más de lo frecuente y asearse en exceso, como reacción instintiva para calmar su molestia. Esto genera que se vean parches de pelo deteriorado y sea caiga con facilidad, por lo que esta es una clara señal de que algo está pasando con su piel. Recuerda que un pelaje sano debe ser suave y brillante, sin rastros de caspa y no debe estar quebradizo.
Identificar la causa del problema con un veterinario
Pueden ser diferentes las cusas por las que los gatos sufran de alergias, desde las que están relacionadas con parásitos, como la hipersensibilidad a las picaduras de pulgas, hasta las que tienen que ver con alergenos externos como el polen, las plantas, desinfectantes y aerosoles. De igual manera hay felinos en los que las intolerancias a algunos alimentos les pueden provocar problemas de piel.
Sea cual sea la causa de la alergia debe estar identificada por un veterinario especialista para que le de un tratamiento con las indicaciones adecuadas para tu gato. Desde fármacos que controlen el rascado, así como vacunas contra alergias. Hay diferentes formas de tratarlo, pero todas deben estar prescritas por un médico especializado y debes ser muy disciplinado y constante para que tenga éxito.
Evitar el contacto con aquello que le produzca la alergia
Es clave, y seguro será una de las primeras recomendaciones del veterinario al descubrir la causa de esa alergia, evitar cualquier contacto que pueda tener con aquello que se lo provoca. Por ejemplo, si tu gato tiene problemas en la piel como dermatitis a causa delos ácaros del polvo, es importante mantener limpio todos los objetos de su entorno como cobijas, alfombras, camas, rascadores y demás objetos en los que puedan estar estos insectos.
De igual manera, si su problema es causado por su alimentación deberás cambiar su dieta por una más adecuada que te indique su veterinario. Existen alimentos especiales para gatos con pieles sensibles, que pueden ayudar a que no tenga reacciones alérgicas, con proteínas y carbohidratos especialmente seleccionados y sin colorantes artificiales, conservantes o cualquier componente tóxico que pueda dañar sus defensas.
Evitar que se rasque y la alergia empeore
Es fundamental, aunque pueda parecer difícil, evitar que tu gato se rasque para prevenir que la alergia se expanda por el resto de la piel o su estado empeore. Además, si ya está en tratamiento, el no rascarse o lamerse son necesarios para que sane. Puedes ayudarte de elementos como un collar isabelino para que así no pueda tocarse o lamerse las zonas con irritación o eccemas. También, existen fundas de silicona para sus uñas que ayudarán a que no expanda la infección con sus uñas.
Las alergias y problemas de la piel en los gatos son muy comunes y pueden tratarse de diferentes formas. Aunque existen remedios caseros y naturales como las aguas de manzanilla y caléndula, siempre será mejor que cualquier cosa que intentes para calmarlo sea guiada por un veterinario.
También, es importante prevenir su irritación usando productos que no afecten su piel ni su pelaje, con componentes totalmente naturales y libres de parabenos y colorantes como nuestros productos Dinky. Descubre todo lo que tenemos para el cuidado de tu gato aquí.
